El teólogo mallorquín Francesc Ramis, dirigió el jueves 23 de febrero, en el Centro Diocesano de Espiritualidad de Begoña, una sesión para el Ministerio ordenado, «El servicio ministerial de una Iglesia de minorías. Perspectiva bíblica», promovida por el Instituto Diocesano de Teología y Pastoral y el Secretariado para el Ministerio Ordenado. Ramís pidió “un ministerio que cuide la comunidad para convertirla en fermento y se cuide el cura, a sí mismo para ser fermento de aquella comunidad”.
A lo largo de su intervención, Ramis hablo del desafío actual del ministerio ordenado en una Iglesia en minoría “no queda más remedio –dijo- que vivirlo con hondura”. Ramis, destacó tres cosas “Reforzar nuestra relación con el Señor. El don de la vocación que nos ha dado”, así como la importancia de tener credibilidad personal como curas “como testigos de Jesús” y, por último, “hacer el esfuerzo por ir a las fronteras, a la periferia, y cuidar la comunidad como fermento del Reino de Dios en el mundo que nos toca vivir».
La sesión ha estado presidida por el Obispo diocesano, mons. Mario Iceta, y varios presbíteros han ofrecido sus testimonios de vida, desde las áreas en las que desarrollan su actividad.