¿Qué nos esta pasando?
Desde aquel decreto de alarma que nos dejó en un estado de shock emocional- que lejos nos queda ¿verdad?- experimento un estado de descentramiento colectivo. Nos hemos visto obligados a retirarnos y a parar nuestra inercia, a abandonar nuestros centros. Curioso. Cuarentena y cuaresma coinciden. Nos sentimos extraños entre otras razones, porque hemos perdido el timón del tiempo con el que gobernamos nuestras vidas. Durante estas semanas el mundo tiene su autonomía.